Este libro es el camino por donde transita el olvido, ese sueño que el tiempo devora. Quien recorra sus páginas pensará que no están en ellas y sin embargo están a su manera. Así, nos reencontramos detrás de mi memoria
Asi comentó El Tiempo
El reencuentro NOEL ARAUJO
A Layisse Cuenca
Dentro del paquete de fin de año cayó en mis manos "El Reencuentro" texto que devoramos en instantes, dada la facilidad y dominio de la autora escritora, poeta, abogada egresada de la universidad además con una especialidad en Derecho Inmobiliario al mismo tiempo ganadora del premio en poesía allá en la madre patria según reporta la solapa del texto. Esmeralda Tosta Montserrat, ha escrito con maestría propia de quien ama el terruño sin importar donde se encuentre a la hora de darle forma a la narración.
Al inicio con su "Pájaro de Mar por Tierra" nos va empujando a recorrer su misión, hasta irnos adentrando en la Península de Macanao, Isla de Margarita .
No hay una sola página que nos compenetre, no hay párrafo que no nos traiga recuerdos porque " El Reencuentro es la historia de nuestros poblados, y con ello cada rincón de ellos: calles, espectáculos callejeros, la muerte con sus familiarizados colaterales, el calamidad juvenil y la experiencia, el drama familiar que se va extendiendo generacionalmente.
Indígenas, realistas, patriotas, lechos embadurnados con agua florida, grillos, palmeras, hamacas, suicidios sin justificación divina, hasta complicidad sacramental. Hay de todo porque nuestra idiosincrasia nos ha llevado a emparentar comunidades.
Zona de valor, libertad, fe desde la conquista hasta la independencia, independencia ésta convertida salitre en los aposentos de una esclavitud virginal
Todo acontecimiento pueblerino sin desligarse un instante de la protección de la Virgen del Valle guía espiritual de los costeños.
La Península de Macanao es el sitio de las cálidas arenas donde Anastasio y sus fieles compañeros Tocón y Collarín hablan, platican de no uno sino tres siglos de historia neoespartana y que nos embriaga con el sabor y olor inconfundible de la playa con sabor a empanadas de cazón.
De ahí que Aguaimar no ha sido ajeno al éxodo generacional dejando fantasmal mesetas, valles, cines, hoteles libros, noticias hasta el sabroso café negro.
El Reencuentro en Aguaimar es la cotidianidad hecha novela.
Fuente : El Tiempo. Edo. Trujillo Venezuela
Con maderas de recuerdos Armamos las esperanzas
MIGUEL DE UNAMUNO
En los ojos del joven, arde la llama; en los del viejo, brilla la luz.
VICTOR HUGO
Las páginas de esta novela se asientan sobre las múltiples posibilidades del recuerdo y sus imbricaciones constantes y cambiantes con la cotidianidad. Pero, sobre todo, en este texto se asumen, con audacia, los registros de la escritura que se postula como inaplazable circunstancia vital y opta por una mirada intimista y minimalista a la vez que no desdeña la riqueza metafórica, que ofrece el lenguaje popular. A través de una sostenida tensión narrativa que recoge el desplazamiento de dos voces, que se enfrentan al deterioro, la autora nos narra el regreso de un joven escritor a los paisajes donde transcurrió parte de su infancia y adolescencia, en Aiguamar, en la Península de Macanao, de la isla de Margarita, así, en medio de la inminente desaparición de este pueblo, se despliegan las historias de varios personajes que cobran vida mediante la evocación de Anastasio, anciano pescador que asume las postrimerías de su existencia con la convicción de la lucha contra el olvido por medio de la palabra.
Nelsón Cordido
Marian M. de Liendo y Carola de Wallis
Esmeralda Tosta y Julio César Arreaza
Alberto Montani y sra.
Esmeralda Tosta Montserrat (Caracas, 1946), abogada especialista en Derecho Inquilinario, poeta y narradora. Ha participado en diversos talleres de creación literaria coordinados por autores de sostenida trayectoria, como Eloi Yagüe, Juan Antonio Calzadilla Arreaza y Raúl Vacas Polo, entre otros.
En 2003 obtuvo el premio de poesía Gracias por su visita (Salamanca, España) con el poema Ámame.
En la actualidad se desempeña en el área de asesoría legal de proyectos habitacionales, y forma parte de un taller de narrativa dirigido por el reconocido escritor venezolano Sael Ibáñez.